*En la entrada del Edifcio B1 de la PUCMM CSTA se sembró el 16 de julio del 2022 un ´caracolillo´ en memoria al Prof. Orlando Jorge Mera. Estas fueron mis palabras en su póstumo homenaje*
En su carrera docente, nos impartió clases para introducción al derecho, derecho administrativo, derecho de la propiedad intelectual y derecho mediático. En la otra parte de su carrera docente, la enseñanza fuera del aula, fue consejero en temas electorales para el comité de derecho, asesor de redacción es escritos académicos y partícipe voluntarioso en nuestras charlas y conversatorios.
Hago un énfasis particular de la 1era edición de la Competencia de Propiedad Intelectual Dra. Rosa Campillo, realizada en el 2015. Esta competencia, la primera competencia interuniversitaria sobre la materia realizada en su momento, fue ideada y organizada de la mano con Prof. Jorge Mera. Quien entre otros, redactó el caso de estudio que fue debatido en la competencia.
Hay una tercera fase de su participación en nuestra formación, que yo llamo las invitaciones al café. De habla calmada y trato afable, el Prof. Orlando mantenía los oídos y el corazón abiertos cada vez que le pedíamos un consejo. Si te percibía preocupado, te sacaba aparte un momento y con las palabras de "estimado" o "distinguido" te brindaba un café, un jugo o un té y te invitaba a desahogarte. De ahí salían consejos para la asignatura, para la carrera, para la profesión y para la vida misma.
Creo que lo hacía tan memorable la palabra del profesor era que te hacía sentir especial. Lo veías hacer reservas en su agenda para tomarse el tiempo compartir las dudas de un estudiante. Quizás fuera algo que hubiera escuchado diez veces antes, pero en ese momento, era lo mas importante del mundo. Y en su respuesta, a pesar de la diferencia profesor-estudiante, te trataba como un igual; recalcando la fe que te tenía y como confiaba en que harías lo correcto.
Un gesto así, para un joven adulto apenas preparándose de cómo enfrentar el mundo, vale el infinito. Y podríamos hacer ahora un breve sondeo para confirmar, que el recuerdo de esta sensación es lo que nos reúne esta mañana.
Tomémonos unos segundos para ver a los demás a nuestro alrededor. Pareciera que entre nosotros algunos somos desconocidos, pero lo cierto es que hemos quedado conectados por la nobleza de alguien quien veía nuestro potencial más allá de nosotros mismos.
Nos convertimos en la viva imagen de una de sus actividades más amadas, la apicultura. Sobre las abejas, él decía que eran un equilibrio para su mente y su alma, que había que brindarles lo mejor y dejarlas ser, que no había que tenerles rencor si te pican, y que podíamos aprender mucho de ellas, por su armonía y su disciplina
De algún modo, esta es otra colmena que el Prof. también ayudo a desarrollar. Esta comunidad es su legado y su memoria seguirá presente mientras nosotros estemos aquí.
Porque al final, no llegaríamos a ser quienes somos hoy, sino fuera por las personas que nos forjaron el camino.
Somos el resultados de las personas que creyeron en nosotros y el Prof. Orlando Jorge Mera fue una de ellas. No me queda más que agradecerle a él, agradecerles a los que están aquí, ya que el se mantiene vivo a través de ustedes. Muchas gracias."