Hay un lugar en el cuerpo
Colocado en el
mismo trayecto del alma
Oriundo de los
sueños
Colocado en un
inverosímil archipiélago de versos y dolor.
Restos de las
emociones marchitas y secas
Alegrías vividas
y vasta inocencia
Miedos y rencores
no pocos
Y una que otra
pérdida de la paciencia.
Esta noche, donde las estrellas no brillan
para mí y la luna no se manifiesta esplendorosa; en esta noche donde no hay
sonidos guturales y la brisa con acaricia los ramajes…siento un ferviente
sufrimiento en el centro de mi pecho…agonizante, lívido y no se darle
explicación.
En esta noche no se me ha ocurrido otra cosa que
escribirte las palabras que nunca leerás…darle el movimiento a mis dedos en
esta noche, esta noche tan vacía, donde se me han congelado las lágrimas en las
venas…es en esta noche donde sólo puedo encomendarme a Dios, porque necesito al
amigo que nunca llegó, tan sólo por esta la noche en que se me ha quebrado el
corazón…literalmente